La Orden HFP/1030/2021, de 29 de septiembre, por la que se configura el sistema de gestión del Plan de Recuperación Transformación y Resilencia se pretende cumplir con el ciclo antifraude.
Fondos europeos y plan de medidas antifraude
La citada orden establece que toda entidad, decisora o ejecutora, que participe en la ejecución de las medidas del PRTR debe disponer de un Plan de medidas antifraude que le permita garantizar y declarar que, en su respectivo ámbito de actuación, los fondos correspondientes se han utilizado de conformidad con las normas aplicables, en particular, en lo que se refiere a la prevención, detección y corrección del fraude, la corrupción y los conflictos de intereses.
El solicitante de las ayudas debe dar fe de que su empresa ha adoptado prácticas acordes a la legislación contrarias al fraude. Para ello, se ha creado el llamado “Test de autoevaluación y riesgo”, el cual recoge cuestionarios orientados a facilitar la autoevaluación del procedimiento aplicado por los órganos ejecutores del PRTR en relación con el adecuado cumplimiento de los principios establecidos.
Declaración responsable sobre el compromiso de cumplimiento
Las entidades encargadas de gestionar y ejecutar las convocatorias de ayudas deben requerir a los beneficiarios una declaración responsable relativa al compromiso de cumplimiento de los principios. La Orden incluye un modelo de esta declaración.
Cumplir con estos principios de compliance es fundamental para poder optar a lo fondos europeos; si se detectan irregularidades o incumplimientos se podría incluso proceder al reintegro de las ayudas.
Por tanto, toda empresa que prevea que puede verse beneficiada por los Fondos Next Generation UE deberá anticiparse y comenzar a desarrollar un programa de compliance.
Un programa que debe garantizar y declarar que se han adoptado las medidas necesarias para prevenir y detectar el fraude, la corrupción y los conflictos de intereses.
A pesar de que la gran mayoría de grandes empresas ya disponen de estos programas de compliance, muchas pymes aún no lo han integrado, en la mayoría de los casos al no considerarse vulnerables a los riesgos penales que de su actividad empresarial pudieran derivar. Por ello, si una pyme quiere beneficiarse de los fondos europeos Next Generation deberá contar lo antes posible con un programa de compliance.